Las enfermeras y enfermeros son profesionales de la salud altamente capacitados que utilizan sus conocimientos y habilidades para ayudar a los pacientes a través de operaciones y procedimientos, desarrollar planes de tratamiento y ofrecer asesoramiento sobre la atención ambulatoria.
La mayoría de las enfermeras tienen un horario bastante variado, por lo que un día en la vida de una enfermera puede incluir una amplia gama de tareas. En este artículo queremos plasmar un día típico en la vida de una enfermera o enfermero. No obstante, en realidad no existe un día típico para un profesional de enfermería. Cada día tiene el potencial de ser trascendental, estimulante, agotador, energizante o todo lo anterior.
En un día cualquiera, las enfermeras pueden ver a las personas en su punto más débil y vulnerable o en su estado más fuerte y casi recuperado para dar de alta. Son testigos de los resultados de las lesiones y enfermedades que pueden terminar con la carrera profesional del paciente o incluso con su vida. Experimentan con tanta regularidad este tipo de situaciones que se vuelven parte del curso.
Es casi imposible retratar un día habitual para una enfermera, dado lo diferentes que pueden ser los lugares de trabajo de atención médica. Asimismo, influye cómo el trabajo puede variar de un turno a otro según los pacientes que una enfermera atiende. Lo que a continuación presentamos es un esquema general de cómo podría ser una jornada laboral para una enfermera en un turno de 12 horas en un hospital.
Despertar temprano
El día de una enfermera a menudo comienza antes de que salga el sol. Enfermeros y enfermeras del turno matutino se levantan de la cama alrededor de las 5 am. Se duchan y desayunan antes de que otros profesionales presionen el botón de detener la alarma.
Muchos turnos de enfermería durante el día empiezan temprano, a menudo a las 7 a.m. Esto significa que el ejercicio, desayuno, café, y la ducha o cualquiera que sea la rutina matutina, puede suceder mucho antes de que el resto del mundo esté listo para motivarse para el día. Si tú eres más del tipo de persona que pone mil alarmas para no quedarse dormido o te gusta pasear y tomarte el tiempo para revisar tu correo electrónico y las noticias por la mañana, entonces la enfermería podría no ser la elección de carrera ideal.
Llegando al hospital
Un hospital no es como una fábrica, donde un turno termina antes de que comience otro y no es necesario que haya comunicación. Las enfermeras nocturnas y las enfermeras diurnas son un equipo, y asegurarse de que los pacientes reciban una atención perfecta significa que hay una transferencia diaria de información al comienzo de cada turno.
La enfermera del día obtiene información sobre lo que sucedió durante la noche. Por ejemplo, si los pacientes tienen necesidades específicas o si hay algo importante que la enfermera debe saber para su turno. Esta también es una oportunidad para que la enfermera lea las notas del médico, examine las historias clínicas de los pacientes, se prepare para su lista de pacientes y revise las asignaciones e instrucciones. Esto puede incluir revisar el correo electrónico o coordinar los horarios del día con los médicos. También organizar pruebas específicas o configurar dispositivos médicos. En pocas palabras, todo lo que mantendrá el turno mejor organizado ocurre desde el principio.
El equipo de enfermería, tanto mujeres y hombres, es parte de un equipo de profesionales sanitarios de primera línea que diagnostican y tratan a los pacientes en diversos entornos. Las enfermeras y enfermeros trabajan con equipos multidisciplinarios que incluyen cirujanos, médicos, especialistas, asistentes, técnicos y muchos otros proveedores de atención médica.
En el check-in y las primeras horas de la llegada al hospital también es una oportunidad para que la enfermera revise los suministros y el inventario, para asegurarse de que tengan suficiente para un turno. Esto es especialmente importante en la sala de emergencias o las salas de cuidados intensivos, donde puede surgir una situación de alto estrés en cualquier momento y cuando menos deseas quedarte sin suministros básicos. Todo lo que la enfermera hace por un paciente se anota, actualiza y registra de inmediato.
Rondas matutinas
Pueden suceder muchas cosas entre turnos, por lo que gran parte de la mañana se dedica a controlar a cada paciente (nuevo o existente) y hacer un seguimiento de su estado. Los análisis de sangre por la mañana son muy comunes, al igual que hacer pruebas de glucosa a los pacientes diabéticos, tomar los signos vitales, etcétera. Las enfermeras también administran los medicamentos programados para sus pacientes durante este tiempo. Si los pacientes necesitan estar preparados para los procedimientos, a menudo sucederá por la mañana.
Los pacientes que están listos para ser dados de alta del hospital deben prepararse con apoyo de la enfermera o enfermero en turno para los procedimientos de salida. Esto incluye obtener la aprobación del médico, retirar las vías intravenosas u otro dispositivo y procesar las últimas pruebas. Por ejemplo, tomar signos vitales o análisis de sangre para confirmar que los pacientes pueden ser dados de alta de manera segura. Finalmente, mencionar a los familiares y al paciente sobre cualquier necesidad de atención de seguimiento.
Finalmente, en las rondas matutinas, las enfermeras también suelen ayudar a sus pacientes con las tareas de la vida diaria. Sobre todo a adultos mayores y otros pacientes que no pueden hacerlo por sí mismos. El enfermero o enfermera en turno puede apoyar a su paciente con el desayuno, con el baño, a vestirse o a caminar.
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Mediodía y hora de la comida
La hora de comer para las enfermeras rara vez es un periodo de tiempo establecido. Obviamente, almorzar es necesario si deseas mantener la energía, pero tener tiempo para hacerlo puede ser un lujo cuando se trata de una lista interminable de pacientes que tienen necesidades inmediatas durante todo el día.
Muchas enfermeras comen un bocado rápido en algún lugar cercano (ya sea en el hospital o cerca) cuando pueden. La hora del almuerzo podría verse interrumpida por una emergencia o simplemente por un horario ajetreado. Además, la hora de comer y el tiempo personal durante el día son definitivamente un bien escaso para las enfermeras. Esto según la carga de trabajo y el tipo de instalación en la que se trabaje, así como el área y tipo de pacientes que se atienda.
El entorno y ritmo de trabajo de una clínica con citas programadas es muy diferente al de un hospital o una situación de atención de urgencia. La comida estratégica, por ejemplo, algo que se trae de casa y puedas comer rápido si es necesario, o comida que puedas comprar en la cafetería es la clave.
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Rondas de la tarde
Para empezar las rondas de la tarde las enfermeras a menudo pueden encontrarse manejando nuevos pacientes. Administran los medicamentos que deben administrarse durante ese tiempo y se ponen al corriente con los registros. Enfermeros y enfermeras tendrán que responder a las preguntas de los pacientes. También deben asegurarse de que tanto los pacientes como sus familiares estén al corriente de su situación clínica y posibles procedimientos.
Similar a las rondas matutinas, por lo general las rondas de la tarde comienzan con un proceso de registro para ver si hay nuevos pacientes. Posteriormente se revisa qué pacientes han sido dados de alta o si el estado de algún otro paciente ha cambiado desde la mañana.
Después de responder dudas frecuentes durante la nueva ronda de control con cada paciente, se revisa sus historias clínicas en busca de actualizaciones. Se continúa tomando notas según sea necesario y, nuevamente, se mantiene un seguimiento cercano con los pacientes. La tarde también es el momento para una nueva ronda de medicamentos que se distribuyen a los pacientes, así como para las pruebas de seguimiento o los procedimientos programados previamente. Las enfermeras ayudan a preparar a los pacientes según sea necesario.
Para una sala posquirúrgica, el personal de enfermería también puede comenzar a ver una afluencia de pacientes que salen de la cirugía al área de recuperación. Por lo general se hace un seguimiento con los cirujanos y médicos según sea necesario, preparando a cada paciente para sus próximas pruebas y procedimientos. Es probable que la enfermera también ayude con cosas como cambiar apósitos y cánulas. Finalmente, con frecuencia se cambian el uniforme y se aseguran de que estos pacientes posquirúrgicos estén cómodos.
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Final del día, registro de salida
Al igual que al comienzo de la jornada laboral por las mañanas, al final del día se ve el proceso de transferencia de turno entre el personal de enfermería diurno y el nocturno. Existe la descarga de información de enfermera a enfermera, ya sea en persona o mediante notas detalladas y registros de pacientes. Sin embargo, el día aún no ha terminado. Enfermeros y enfermeras deben asegurarse de que la transición al siguiente turno transcurra con la misma fluidez con la que comenzó su propio turno por la mañana para que los pacientes reciban una atención constante. Por lo tanto, se debe verificar y volver a verificar la información del paciente para asegurarse de que todo sea lo más preciso y claro posible.
Antes de irse, la enfermera puede comenzar a prepararse para el turno del día siguiente. Esto incluye revisar citas, correos electrónicos, y revisar las asignaciones. En ese momento, la enfermera puede irse, solo para comenzar el proceso nuevamente en aproximadamente 12 horas.
Cómo es el día de una enfermera puede variar de diferentes maneras. Por ejemplo, una enfermera a domicilio tendrá un conjunto de tareas diferente al de una enfermera de hospital, que tendrá un día diferente al de una enfermera en un consultorio privado. No importa lo que haga una enfermera y dónde lo haga, siempre existen las situaciones impredecibles en el mundo médico. Siempre se necesita estar alerta y listo para emergencias o necesidades urgentes. La labor de enfermería es un campo increíblemente exigente, pero puede ser muy gratificante.
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